
VUELVEN LOS ROMEROS
El caso es que una noche tranquila de verano, serían como las diez, me ordena la parienta (ella siempre me ordena imperiosamente, ! Antonio ven, lleva, toma, trae, calla, no comas tanto !) a salir a la calle y tirar la basura al contenedor. Pues ahí voy yo con mi gran bolsa de basura que me arrastra por el suelo, absorto en mis pensamientos……… (cuando vuelva me voy a comer un pedazo de chuleta de ternera.....¡ anda que no tengo hambre!), me cruzo un perro flaco de patas largas, asimismo él también absorto en sus pensamientos (¿qué llevará este capullo en la bolsa de basura, seguro que algún huesesillo.......¡anda que no tengo hambre!). De pronto el perro y yo pegamos un grito de miedo (él un lastimoso ladrido).
Les cuento los motivos:DE REPENTE UN IMPROPERIO…(Vuelven los romeros)
Blog: antonioaguilera.blogspot.com
De repente un improperio,
una maldición.
Se asusta el perro.
El cuerpo sufre
gran estremecimiento,
un retemblar
un golpe siniestro.
¡Maldita sea!
se expresa el verbo.
Una gran estampida
surca el cielo,
aterrados los pájaros,
el silencio se torna
en horrible trueno.
De campanas y cohetes
causantes del miedo.
En jovial caravana
causantes del miedo.
En jovial caravana
vienen los romeros,
unos van a pie
otros en jumento.
Por el prado arriba
vienen subiendo,
ora rezan una salve
ora un padre nuestro.
El pueblo les recibe
con gran estruendo
reventando cohetes
en el firmamento.
Yo que estaba
en mis asuntos y ajeno,
paseando en un parque
con un paso lento.
Por culpa de esta gente
Por culpa de esta gente
yo he escrito esto,
por su mucho ruido
y poco cerebro.
A los pajarillos,
a mí y al perro,
nos ha estallado el tímpano
y el hígado dentro.
Porque no soy yo
de equipaje ligero,
que no soy don Antonio
el filántropo bueno.
De repente,
un improperio,
una maldición
que produjo el NECIO.